La Santa Sede abre la vía para la beatificación de Francisco Barrecheguren y su hija Conchita

El anuncio se produjo el pasado miércoles, un día después de que el Papa Francisco recibiese en audiencia al prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos

Redacción  |  8 de mayo de 2020
Francisco y Conchita Barrecheguren - ARZOBISPADO DE GRANADA
Francisco y Conchita Barrecheguren - ARZOBISPADO DE GRANADA

La Santa Sede ha anunciado la autorización para que se promulgue el decreto de virtudes heroicas de los siervos de Dios Francisco Barrecheguren y su hija Conchita, cuyos restos reposan en el santuario de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, en Granada capital.

El anuncio se produjo el pasado miércoles, un día después de que el Papa Francisco recibiese en audiencia al prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal Angelo Becciu, autorizando a promulgar estos decretos, que abren así el camino para la beatificación de ambos.

 

Según ha informado el Arzobispado de Granada, Conchita Barrecheguren nació en Granada el 27 de noviembre de 1905. Su padre, Francisco Barrecheguren, de Lérida y desciendente de una familia vasco-catalana, estuvo casado con Concepción García Calvo, granadina. En 1937, quedó viudo de su esposa.

Cuando cumplió 65 años, entró como postulante con los Misioneros Redentoristas de Granada y el 24 de agosto de 1947 hizo su profesión religiosa en Nava del Rey, en Valladolid. Dos años después, el 25 de julio de 1949, era ordenado sacerdote en Madrid. Volvió a Granada en el verano de 1949, y falleció el 7 de octubre de 1957.

La causa de beatificación y canonización de Conchita, se inicia el 21 de septiembre de 1938, introducida por el cardenal Parrado, arzobispo de Granada, y se clausura, en su fase diocesana, el 7 de noviembre de 1945. El 9 de febrero de 1956, el Papa Pío XII aprobó el juicio sobre sus escritos y declaró que en ellos no existe cosa alguna que sea obstáculo, para proseguir su proceso de Beatificación y Canonización. Murió el 13 de mayo de 1927.