Pinos Puente recibe a Jorge Mora en su reto a pie hasta Finisterre

El alcalde de Pinos Puente, Enrique Medina, junto a miembros del equipo de gobierno, ha dado la bienvenida en el albergue municipal al joven granadino Jorge Mora, que ha iniciado un reto solidario y medioambiental: recorrer a pie el Camino Mozárabe de Santiago desde La Zubia hasta Finisterre, más de 1.300 kilómetros, para concienciar sobre la “basuraleza” y dar visibilidad a la diversidad comunicativa, como la tartamudez.

Aunque la salida oficial tuvo lugar en La Zubia, Pinos Puente ha sido la primera parada del proyecto AlpargataSOS, que combina el esfuerzo físico con la recogida de residuos en el entorno natural y entrevistas para visibilizar realidades como la salud mental y la superación personal.

“El Camino Mozárabe es uno de los ejes de atracción turística que queremos potenciar en Pinos Puente, y por eso reformamos este albergue municipal para ofrecer a los peregrinos un lugar de descanso digno y acogedor. Hoy lo abrimos con orgullo para recibir a Jorge, un ejemplo de compromiso social, medioambiental y personal”, señaló Medina.

La primera etapa, de 23 kilómetros, unió La Zubia con Pinos Puente. Desde aquí, Jorge continuará hacia Moclín y, posteriormente, por distintas localidades de Andalucía, Extremadura, Castilla y Galicia, hasta alcanzar su meta a principios de octubre.

El proyecto cuenta con un presupuesto estimado de 3.000 euros, que se financiará con donaciones particulares y patrocinios. Cada kilómetro del recorrido puede “adoptarse” con un aporte de 3 euros, destinados a cubrir alojamiento, alimentación, material, transporte e imprevistos. Las aportaciones pueden realizarse por Bizum, transferencia bancaria o en efectivo.

“Queremos dar todo nuestro ánimo a Jorge y mostrarle que en Pinos Puente siempre tendrá una puerta abierta. Su causa conecta con valores que defendemos: cuidado del medio ambiente, impulso al Camino Mozárabe y turismo sostenible y humano”, insistió el alcalde.

Convencido de que “la pasión salva montañas”, Jorge Mora afronta este reto con la esperanza de que su viaje “sea un motor para construir, paso a paso, un mundo más amable, sano, limpio y humano”.