Salud prepara a los profesionales sanitarios frente a la presencia del 'chemsex'
La Escuela Andaluza de Salud Pública imparte un programa formativo dirigido a la prevención y la reducción de daños
La Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), institución de la Consejería de Salud y Consumo, inicia el próximo 2 de junio un curso dirigido a profesionales sanitarios y del ámbito de la atención a la drogodependencia sobre el fenómeno chemsex y las necesidades de salud asociadas.
Este curso, que cuenta también con la participación del Servicio Andaluz de Salud (SAS), es parte del proceso de implementación del Plan Andaluz de ITS, VIH y Sida (PAITSIDA) que la Consejería de Salud y Consumo impulsa a través de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, y del proceso de elaboración de la Estrategia de Salud Sexual y Reproductiva de Andalucía.
El chemsex es una práctica que combina el consumo de drogas con las relaciones sexuales, habitualmente en encuentros prolongados. Aunque puede darse en distintos contextos, está especialmente vinculado a la cultura sexual gay. Así lo describe el Ministerio de Sanidad, que lo identifica como una forma particular de consumo sexualizado de sustancias.
Según datos de la Encuesta Europea EMIS 2017 sobre conductas sexuales, dirigida a hombres gais, bisexuales y otros hombres que tienen sexo con hombres, en España, el 14% de los hombres que habían tenido sexo con otros hombres en los últimos 12 meses había usado drogas estimulantes para que el sexo fuera más intenso o durara más y el 7,6% lo había hecho en las últimas cuatro semanas.
La práctica de chemsex puede estar asociada al incremento de riesgos para la salud sexual, las adicciones y la salud mental y provocar un deterioro en la situación social de la persona y su bienestar.
Desde la EASP, en colaboración con la Consejería de Salud y Consumo y el SAS, se desarrollará este programa para mejorar la sensibilización y comprensión del fenómeno del chemsex entre profesionales asistenciales del ámbito sanitario y social.
El programa ofrece una introducción a los conocimientos básicos necesarios para comprender el fenómeno sociocultural del chemsex, abordándolo desde una perspectiva inclusiva que respeta la diversidad sexual, corporal y de género, sin caer en estigmatizaciones. Esta mirada va a permitir dimensionar su impacto en términos de salud pública y comprender su relevancia epidemiológica, asimismo, se brindan herramientas para identificar y analizar los patrones más frecuentes de consumo y los riesgos asociados a las sustancias utilizadas en contextos de chemsex.
El curso también contempla el desarrollo de habilidades de comunicación y entrevista clínica, basadas en la confianza, el respeto y la escucha activa, promoviendo una aproximación sensible a la historia sexual de las personas y a sus hábitos de consumo. Además, se introduce el modelo de acompañamiento continuado centrado en la persona, junto con el consejo asistido como estrategia clave para la comunicación y el seguimiento de quienes se encuentran involucrados en estas prácticas. Este enfoque busca fortalecer el vínculo terapéutico y mejorar la adherencia a los procesos de cuidado.
Por último, el programa facilita el reconocimiento de los recursos asistenciales y comunitarios disponibles para el abordaje del chemsex, entendiendo que el trabajo articulado entre profesionales y organizaciones es esencial para ofrecer respuestas efectivas y humanas a esta realidad.
Cerca de 800 profesionales han solicitado realizar esta formación para la que se prevé nuevas ediciones.
El objetivo de este encuentro es difundir los logros, avances y desafíos relacionados con estas patologías desde una perspectiva de la salud pública
Rocío Hernández presenta el Plan Andaluz de Atención a la Cronicidad a los profesionales sanitarios y gerentes en un acto en la Escuela Andaluza de Salud Pública
