Pedro Fernández expresa su "desazón" ante la situación del hijo menor de Juana Rivas

El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha expresado este martes su "desazón" ante la "situación compleja y complicada" que se vive en Granada en torno a la entrega del hijo menor de Juana Rivas a su padre, el italiano Francesco Arcuri, quien tiene la custodia del menor por resolución judicial.

En declaraciones a los medios en Málaga, y antes de conocerse la decisión judicial de aplazar hasta el próximo viernes la entrega del niño, Fernández ha señalado que le provoca "tristeza" y "preocupación" ver cómo se desarrolla un proceso en el que "el menor mantiene una actitud de rechazo total y absoluta a irse con su padre".

El delegado ha confirmado que recibió información directa del jefe provincial de la Policía Nacional en Granada, quien trasladó que la situación en el punto de encuentro familiar estaba siendo “difícil”, y que la reacción de la madre derivó en la intervención de los servicios médicos, tras sufrir una crisis de ansiedad que obligó a su traslado en ambulancia.

Pedro Fernández ha evitado valorar el contenido de la resolución judicial que ordena el regreso del menor a Italia, pero ha insistido en que se trata de una situación “muy difícil”, especialmente por lo que implica ver a un menor "que se niega a cumplir una orden que afecta directamente a su vida personal".

En este contexto, ha recordado que Francesco Arcuri está investigado por las autoridades judiciales italianas por presuntos malos tratos en el ámbito familiar, tras la denuncia de Juana Rivas. Este procedimiento, aún en curso, ha motivado que la madre solicitara la suspensión de la entrega del niño hasta que se esclarezcan los hechos.

El caso ha provocado una fuerte conmoción pública, con reacciones tanto en el ámbito político como en colectivos sociales y de defensa de los derechos del menor, que reclaman una revisión del procedimiento con base en el interés superior del niño y su bienestar emocional.