El Gobierno de México invita a Oscar Cordón, catedrático de la UGR, a disertar sobre Inteligencia Artificial en ciencias forenses

La aplicación de nuevas tecnologías podría permitir una identificación de víctimas en base a sus huesos de manera más certera y en menor tiempo

Redacción  |  31 de julio de 2020
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Oscar Cordón, reconocido catedrático de la Universidad de Granada y especialista en Inteligencia Artificial (IA), ha realizado una disertación a solicitud de la Dirección general de Política Pública de Derechos Humanos del Gobierno de México. La charla online, titulada“La inteligencia artificial aplicada a las ciencias forenses”, se ha realizado en el marco del seminario Las ciencias forenses desde un enfoque de derechos humanos.

La intención ha sido mostrar cómo la IA puede contribuir a reconocer la identidad de víctimas de desastres naturales, accidentes aéreos, crímenes y conflictos bélicos.Si no se puede acceder al ADN o utilizar las huellas dactilares, se puede trabajar en la identificación con métodos forenses basados en el esqueleto, como la comparación de radiografías, el análisis dental o la superposición craneofacial. Sin embargo, en muchas ocasiones estas técnicas se utilizan con paradigmas de observación antiguos, de manera poco sistemática y con una demora de tiempo de varios días.

Cordón explica que una de las técnicas más utilizadas es la superposición craneofacial ya que, así como se identifica a las personas con huellas dactilares,se parte de la base que a cada cara le corresponde un cráneo. “Cuando aparecen restos óseos, el antropólogo forense los analiza y determina un perfil biológico (sexo, edad estimada, etnia, complexión, etc.) y se hace una selección de candidatospara su identificación. Haciendo uso del cráneo encontrado,lo comparan con una foto del candidato para ver si se corresponde o no de acuerdo a criterios morfológicos, por ejemplo,viendo si la estructura de las cuencas oculares, la nariz o los dientes encaja. Es una técnica que hoy emplea mucho tiempo, pero nosotros podemos asistir al antropólogo forense en la aplicación del método haciendo uso de tecnologías de IA: obteniendo un modelo 3D del cráneo mediante un escáner, proyectándolo de forma automática sobre la imagen del rostro y usando un sistema de ayuda a la decisión para saber el porcentaje de matching (emparejamiento), ayudando al forense a tener una mayor certeza”, explica el catedrático.

 

En ese sentido, cabe remarcar que el perito forense es quien debe definir la identidad de la persona y las nuevas tecnologías pueden servirle de ayuda para tomar esa decisión. La aplicación de Inteligencia Artificial podría dar el bagaje tecnológico necesario para que las técnicas forenses sobre esqueletos pasen de una mirada actualmente subjetiva, lenta y no reproductible a un paradigma más certero, confiable y con procedimientos establecidos.

Es así que Cordón y su equipo trabajan con el Laboratorio de Antropología Física de la Universidad de Granada desde hace 15 años. A lo largo de este tiempo, los miembros de este equipo interdisciplinar han brindado asistencia a forenses de México, India, el sudeste asiático, Lituania, etc. colaborando con el reconocimiento de cuerpos en fosas comunes o víctimas de guerra como en Lituania o la Guerra Civil Española. Además, con la empresa Panacea, spin off de la UGR, desarrollan software de identificación para automatizar el procedimiento, disponiendo de una patente internacional del método de identificación basado en IA. “Uno de los próximos retos es colaborar con el Instituto de Medicina Legal de Granada y Cruz RojaEspañolaparaidentificar a los inmigrantes que fallecen intentando cruzar en el estrecho, a través de sus huesos y de imágenes que aporten los familiares. La identidad es un derecho universal de todas las personas”, reflexiona Cordón.

 
 
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