Un estudio de la UGR revela que los bebés prematuros presentan más dificultades para cambiar el foco de atención
Las investigadoras han comprobado que los niños con menor edad gestacional al nacer (más prematuros) muestran "mayor lentitud y variabilidad"
Científicas del Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento (Cimcyc) de la Universidad de Granada (UGR) han participado en un estudio internacional que demuestra que la edad gestacional influye directamente en la capacidad de los bebés para cambiar el foco de atención entre diferentes estímulos durante la primera infancia.
Según los resultados, los niños nacidos con menor edad gestacional —es decir, los más prematuros— muestran una mayor lentitud y variabilidad al cambiar su atención respecto a los nacidos a término, que presentan un rendimiento más predecible y consistente.
La investigación se apoyó en la tarea experimental 'Gap-Overlap', que evalúa la habilidad para desenganchar la atención de un estímulo y redirigirla hacia otro. En el experimento participaron 35 niños de 16 meses (prematuros y nacidos a término), a quienes se medía la rapidez con la que cambiaban su atención de una imagen central a un estímulo periférico en dos condiciones distintas: una en la que el estímulo central desaparece antes de aparecer el periférico ('gap'), y otra en la que ambos estímulos coinciden en el tiempo ('overlap'). Los resultados revelaron que el cambio de atención es más rápido en la condición 'gap', un hallazgo que se replica en los estudios previos.
Las investigadoras subrayan que la dificultad para desenganchar la atención es especialmente notable en la población prematura, lo que podría repercutir en diferentes áreas del desarrollo cognitivo y emocional a largo plazo. Este proceso es crucial para la flexibilidad cognitiva, el aprendizaje y la regulación emocional desde edades tempranas.
El trabajo concluye que la identificación temprana de niños con dificultades en estas habilidades permitirá diseñar intervenciones específicas para mejorar el control atencional, especialmente en casos de prematuridad, y favorecer así el desarrollo académico y cognitivo de la infancia.
Los resultados señalan que eliminar el tracto digestivo de los pescados a bordo del barco justo tras la captura, al menos en el caso de la faneca, disminuye el peligro de intoxicación